lunes, 9 de febrero de 2009

Ed Wood: Cuando ser el peor no es tan malo



Nacido en Poughkeepsie (ciudad impronunciable, carajo), el joven Ed se enganchó desde muy pequeño con el cine, obviamente por las películas de terror y algún western. Cuando cumplió 11 años sus padres le regalaron una cámara de cine: esto fue el comienzo de su impresentable carrera.
Fue soldado en la Segunda Guerra (donde años después confesó haber combatido vistiendo ropa interior de mujer) y años más tarde se estableció en Hollywood... Lugar en el que empezó a actuar en obras de teatro (¿Se vestiría de mujer?) a la vez que intentaba encontrar productores dispuestos a financiar sus alocados proyectos.

Un tal Alex Gordon, tan loco como Wood, escribió con él algunos guiones y le presentó al ya decadente Bela Lugosi, famoso por su personaje de Drácula. Este sería su actor fetiche(?) aunque no le duraría demasiado...

Su primera pelícucla fue Glen o Glenda, (1953), un pastiche donde lo único rescatable, si se puede llamar así, era que tocaba el tema del travestismo, un tema recurrente en la cabeza del director ( y en el cajón de su ropa interior)

Su segunda película, La novia del monstruo (1955) supuso la primera incursión del peculiar director en el género de terror, dando el papel protagonista a Béla Lugosi y secundado por el luchador sueco Tor Johnson.

En 1956 muere Bela Lugosi, hecho que significó un duro golpe para Ed, el cual, tras varias incursiones en la televisión y proyectos de menor categoría, finalmente rueda en 1959 la que por muchos es considerada su peor película (o mejor, según como se mire): Plan 9 del espacio exterior. Partiendo de las últimas escenas que rodó Lugosi en vida (apenas 5 minutos), Ed escribió el guión en menos de dos semanas y utilizó metraje sobrante en estudios de otras películas. Con un presupuesto inferior a 6000 dólares, rodó una película con muchos agujeros y fallos de puesta en escena, que difícilmente consiguió un distribuidor y que, no dando beneficios, fue retirada rápidamente de los teatros y salas donde se estrenó.

En 1959 estreno la película Night of the Ghouls la secuela de Bride of the Monster. En ella podemos ver de actor a Criswell, el vidente que predijo la muerte de Kennedy.Esta película tiene momentos memorables como cadáveres que son esqueletos de plástico, la aparición de un demonio que es un hombre de color con un salacot...

Después de este film se dedicó a realizar películas semipornográficas como Death of a travestite. Estas películas no fueron tan conocidas como las anteriores.

Al momento de su muerte, en 1978, había quedado en el olvido, hasta que ese mismo año se publicó un libro, The Golden Turkey Awards, que lo definía como el peor director de cine de todos los tiempos.

Disfrutemos juntos del ciclo de Wood... Despues tomaremos algunas copas y Dios dirá.

Sir William The Red

7 comentarios:

  1. Dr. Jerán y/o Sir Willy:

    No está en los planes del ciclo la proyección de Glen or Glenda? Me gustaría verla, ya que quizá me ayude a definirme.
    Los abrazo suave, con suéter de angora.

    El Negro de División Maiami.

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  2. Si, sin duda. Cuando hagamos el ciclo de cine para travestis no asumidos te avisamos. Eso sí, lleva la cédula(?) y algo para tomar.
    SW

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  3. Cuando hagan un ciclo de Marvel voy, sino ni en pedo voy a ver sus películas de gente rara, como ustedes.
    Abrazo
    Spiderman

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  4. Estimado Peter: Vamos a hacer el ciclo de Marvel el 29 de febrero del 2064.
    Te esperamos(?)

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  5. Dr Jeran: Esas peliculas de las que ud habla realmente existe o es solo un resultado de no haber tomado su medicación?
    Gracias.-
    Charly Manson

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  6. Mi estimado eunuco mental sr. Manson. primero aprenda a escribir correctamente, si primero se refiere a un objeto en plural despues no puede hacerlo en singular , me marea y me hace gomitar. Segundo lo que hago yo con el viagra es cosa mia para eso me lo receto y me lo pago con la platita que me gano haciendo sufrir a pobres incautos.
    Queda ud. invitado a participar de las proyecciones programadas asi se saca las dudas.
    Muy endurecido, Dr. Rodolfo Jeran.

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